Sin dejar pasar mucho tiempo desde la visita de la Capilla Real, proponemos algunas actividades —articuladas en las tres preguntas formuladas en el apartado sobre interpretación patrimonial— para evaluar el trabajo realizado de preparación y visita:
• ¿Qué queremos que nuestros alumnos sepan de la Capilla Real? Mediante la interpretación, informamos. Objetivo cognoscitivo que ha de concretarse y definirse atendiendo a los elementos fundamentales, a un mensaje básico acorde con la edad psicológica de los visitantes.
• ¿Qué queremos que nuestros alumnos sientan antes, durante y después de la visita? Mediante la interpretación, provocamos sentimientos y actitudes. Objetivo estético que apunta a la emotividad como parte clave en el desarrollo personal.
• ¿Qué queremos que nuestros alumnos vivan como cristianos? Mediante la interpretación, desvelamos el sentido religioso de este enclave patrimonial. Objetivo pastoral que debe corroborar en la fe, fundamentar la esperanza, estimular el amor.
Como preguntas-guía las siguientes:
• ¿Qué hemos aprendido en nuestra visita a la Capilla Real?
• ¿Qué hemos sentido durante nuestra visita a la Capilla Real?
• ¿Qué hemos vivido, como cristianos, al visitar la Capilla Real?
• ¿Con qué frase resumiríamos nuestra visita a la Capilla Real?
• ¿Para qué nos ha servido el trabajo de preparación en grupo de la visita?
• ¿He conocido mejor a mis compañeros? ¿Por qué?
• Y todo esto, ¿para qué?
Posibles actividades complementarias:
• Conversación con los compañeros del grupo de trabajo para resumir en una sola frase toda la experiencia de la visita y, a continuación, presentarla a los otros compañeros de la clase.
• Mural. Orientado a que otras clases y alumnos del colegio conozcan los resultados de esta visita.
• Carta a un amigo, familiar, compañero, contando la experiencia personal vivida.